Francisco Camilo: mitología y pintura en el Madrid de Felipe IV
- Post by: historiasimancas
- 29 noviembre, 2019
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Uno de los pintores menos conocidos del Barroco español centra la ponencia más artística del Ciclo de Otoño del IUHS de la mano de Ángel Aterido, doctor en Historia del Arte
Los historiadores del arte saben bien que a través de las obras se puede conocer la sociedad de la época en la que fueron creadas. Esto es lo que se ha demostrado en la jornada del miércoles del Ciclo de Otoño del Instituto Universitario de Historia de Simancas, celebrado en la Universidad de Valladolid. Un ciclo en el que también ha habido tiempo este miércoles para la pintura. El profesor asociado de la Universidad Complutense de Madrid, Ángel Aterido, ha trasladado a estudiantes e investigadores parte de su conocimiento sobre el Barroco español y la figura de uno de sus exponentes menos visibles para el gran público: Francisco Camilo (Madrid, 1615-1673).
Aterido ha explicado que el Madrid del siglo XVII o, al menos la realidad que vivía la Corte Real, se ve reflejada en los cuadros de Camilo, cargados de mitos clásicos. El pintor madrileño nunca fue “pintor del Rey”, pero sí realizó obras para Felipe IV y para el Alcázar de Madrid, destruido en el incendio de 1734. El sorprendente cuadro Alegoría de los planetas , según ha revelado el profesor Aterido tras sus investigaciones, está relacionado directamente con las desaparecidas escenas al fresco sobre las Metamorfosis de Ovidio que pintó Francisco Camilo en el Alcázar. “Una perfecta hibridación de la Corte del rey católico con la mitología, que formaba parte del lenguaje habitual de la Corte”, en palabras del ponente.
Mediante un recorrido visual de hora y media por las obras más representativas de Francisco Camilo, Aterido ha mostrado cómo mitología y pintura iban de la mano en el Barroco que representa este pintor en sintonía también con los gustos y la demanda del rey Felipe IV. Todo esto ocurría mientras el Alcázar se estaba barroquizando, “se quitaba su aspecto medieval y se convertía en uno de los palacios más lujosos de la Europa de la época”, explicaba Aterido. El mito de la caja de Pandora, por ejemplo, estaba representado en el Salón de los Espejos del palacio. La mitología había encontrado en las pinturas del Alcázar una consolidación gracias al público elitista al que se estaba dirigido.
Esta mitología expresada en la pintura no se dio por casualidad. Ángel Aterido ha recordado que “la literatura del Siglo de Oro español hacía referencias continuas a la mitología clásica” y ha puesto como ejemplo a Lope de Vega o Calderón de la Barca. Influenciados por los dueños de las palabras, los amos del pincel también comenzaron a incluir los mitos. Sin embargo, no solo de la mitología vivió Camilo, ya que también fue un prolífico autor de cuadros de altar, con obras como Cristo de las injurias o San Joaquín y la Virgen niña.
Aterido continuaba la ponencia repasando las ideas presentes en la pintura barroca y por extensión en la de Camilo, como el vanitas, representado con símbolos del tópico tempus fugit y la certeza de la muerte. Unos niños jugando con una pompa de jabón simbolizan en la pintura de Camilo la belleza frágil y fugaz de la vida humana.
Después de profundizar así en la pintura barroca de este pintor, la ponencia ha terminado con una interesante revelación entre la relación a través de las obras de Francisco Camilo y el escultor Gregorio Fernández. Según ha explicado el profesor Aterido, el artista madrileño tuvo que asomarse en algún momento al Cristo Yacente del escultor que está situado hoy en el Museo de Escultura de Valladolid, pues hay un lienzo inspirado en ese mismo yacente.
Ese es el poder de la pintura, que “le da el pálpito de vida, el color, la encarnación”, a una escultura en este caso, explicaba entusiasmado el profesor antes de despedir a las setenta personas que habían acudido a aprender un poco más sobre el arte del Siglo de Oro español.